Hay un aire de nostalgia que planea sobre nuestras cocinas.
Hay sabores y olores que no deben perderse, platos… que nos transportan a la niñez, recetas de madres, abuelas y bisabuelas, económicas, fáciles de hacer, con productos de temporada y…sobre todo, de nuestra tierra. ¡La mejor herencia gastronómica que nos pueden dejar!
Porque lo clásico….siempre ha estado en la base de las cocinas más modernas.
Sabores y… aromas que envolvieron siempre a las madres, y que, mezclados con esos otros que cada uno de nosotros tenemos de la propia, seguro que hacen nuestra esta corta conversación:
-Mamá, ¡qué bien hueles!
-¿Sí?… ¿y a qué huelo?
-Hueles a mamá: ¡el mejor olor del mundo!
Desde EMP, ¡Felicidades a todas las mamás!